Siempre hay un lugar especial donde perderse en Irlanda con la familia
Glendalough significa en gaélico “Valle de los lagos” y es, sin duda, uno de los parajes naturales más impresionantes que se pueden encontrar en los alrededores de Dublín y, probablemente, en toda Irlanda.
El lugar está enclavado en la zona de montes de Wicklow -en un parque nacional- y es muy recomendable, si se puede, visitar más paisajes naturales de la zona. Glendalough se puede ver en una mañana o una tarde pero, si se combina con otras visitas cercanas, es recomendable estar todo el día de excursión.
Glendalough: Historia y paisajes
Aparte de ser una zona de altísimo valor natural, tiene un gran valor histórico, ya que San Kevin decidió a finales del siglo quinto elegir aquel lugar para llevar una vida de ermitaño a la que, con el paso del tiempo, se fueron uniendo más personas para crear una comunidad que pervivió hasta el siglo XVII y de la que hoy quedan aún algunos restos con su monasterio.
Lago Superior en Glendalough
En la zona hay dos lagos, el Superior e Inferior, rodeados de montañas y árboles. Junto a estos lagos aparecen los escasos restos del monasterio y de allí salen también varios caminos de senderismo que van a dar a la cima de los montes cercanos.
Si se tienen tiempo y ganas, son una buena posibilidad para pasar el día entero. Pero, por el contrario, si se prefiere tener un viaje tranquilo, sin mucho esfuerzo físico, es más recomendable no internarse por las montañas y, simplemente, disfrutar de los lagos o de la información que se puede obtener sobre la Irlanda monástica en el centro de visitantes del complejo.